Si tenéis que elegir una estación predilecta, seguramente el verano será la ganadora. Pues con el veranillo estáis más alegre, disfrutáis más tiempo del día, salidas con amigos y amigas, vacaciones en la playa, deportes al aire libre y un sinfín de actividades que con el frío no os podéis permitir.

Sin embargo hay “algo” que sufre mucho con nuestra gran exposición: la piel.
El rastro de los diferentes protectores solares que terminan asfixiando nuestros poros, las largas horas en la playa recibiendo los rayos solares constantemente, la sal del agua del mar, los productos en las piscinas, entre otras cosas, nos dejan como resultado: una piel opaca, deshidratada, apagada, a veces con manchas y alguna que otra “arruguita”.

Lo ideal es que antes de cada verano preparéis vuestra piel para que no sufra tal impacto, pero como no es tan sencillo os dejo algunos tips para volver a tener una piel luminosa, hidratada y saludable:

No escatiméis en cuidados pues la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y merece una atención proporcional. Consultad profesionales expertos para lograr que la piel se vea saludable y ante la menor duda de cuál es el producto o tratamiento adecuado, informaros.

Si queréis conocer nuestros tratamientos post-verano en nuestra tienda tenemos todo tipo de procedimientos que te ayudarán en cada proceso.